sábado, 18 de julho de 2009

SINTRA












Sintra - Patrimonio da Humanidad

Fue conquistada por Alfonso I de Portugal a la Taifa de Badajoz en 1147, después de la toma de Lisboa; recibió fueros de ese mismo rey el 9 de enero de 1154.


PAISAJE CULTURAL DEL PUEBLO Y SIERRA DE SINTRA

Sintra y su Sierra son verdaderamente únicas. Es cierto que son muy bellas. Pero sobretodo, únicas.

Es esta singularidad en la cual esta basada la celebridad de Sintra, su renombre internacional entre poetas, artistas y pensadores esta diferencia reposa en la excepcional sincronización entre la naturaleza y los antiguos monumentos así como es considerada la pionera de los sueños arquitectónicos que suscitó concretamente en el ámbito del Romanticismo.

En Portugal no hay ningún lugar parecido a Sintra. En Europa así como en el resto del mundo, resulta difícil encontrar un paralelo exacto por su complejidad y también por su característica sincronización verificada entre Patrimonio Natural y Patrimonio Construido.

Sin embargo, se podrían nombrar algunas regiones de Europa Central, donde se edificaron soberbios palacios Románticos durante los años 60 del siglo XIX rodeados de paisajes magníficos.

Pero debería recordarse que el Palacio da Pena, en Sintra prototipo del Romanticismo Europeo en la exuberante mezcla de estilos con sus ecos exóticos y medievales precede a sus congéneres alemanes en por lo menos un cuarto de Siglo. Además de su inmenso paisaje natural, se sitúa en el centro de un parque natural único en su género, constituido por miles de árboles de todos los rincones del mundo. Este fenómeno también se revela de alguna forma en el Parque de Monserrat.


Sintra Paisaje Cultural

El paisaje cultural de Sintra se encuadra simultáneamente en las categorías II, IV y V del párrafo 24 establecidas por la UNESCO en la Orientations devant guide la mise en oeuvre de la convention du Patrimoine Mundial.
Durante el siglo XIX Sintra ejerció una influencia considerable sobre el desarrollo de la arquitectura romántica europea (palacio da Pena, Monserrat).

No obstante, su interés no se resume solamente a 1 o 2 edificios de evidente importancia, sino a una diversidad de palacios y parques; de casas señoriales, con sus jardines y bosques; de palacetes y chales envueltos en una vegetación exuberante; de largos trechos de murallas que serpentean las mas altas cumbres de la sierra, invocando siglos pasados; de conventos que invitan a la meditación , rodeados de musgosos acantilados y de fuentes murmurantes ; de austeras iglesias y capillas, así como las ermitas mas "humanizadas" y Populares , unas y otras constituyendo nexos de Fé y Arte durante siglos, en definitiva vestigios arqueológicos varias veces con milenios que se remiten hacia nuestras raíces mas lejanas.


Sintra Patrimonio de la Humanidad

Por todas estas razones y también por otras muchas Sintra verdaderamente merece ser clasificada por la UNESCO como Patrimonio Mundial, habiendo estado inscrita sobre la designación de Paisaje Natural de Sintra.
Hasta porque en el imaginario colectivo Sintra era desde hace muchos siglos Patrimonio de la Humanidad


RESUMEN HISTÓRICO

Clasificada por la UNESCO como Paisaje Cultural y Patrimonio de la Humanidad – durante la 19ª Sesión del Comité de la UNESCO, en Berlín el 19 de Diciembre de 1995 – Sintra es uno de esos sitios mágicos donde la naturaleza y el hombre combinaron en una simbiosis perfecta, como queriendo dejarnos sorprendidos y rendidos a la belleza de la obra.

Es esa belleza y la memoria colectiva heredada de nuestros antepasados, que tenemos que preservar y completar para que las futuras generaciones puedan encontrar aquí, como nosotros encontramos, las raíces culturales y los valores humanos tan importantes para que los pueblos vivan y convivan armoniosamente.

Testigo del paso de muchos pueblos y culturas a lo largo de los tiempos, que siempre supieron respetar los vestigios que los otros dejaron, la expresión que mejor carazteriza a Sintra es la tolerancia cultural.

Es esta tolerancia cultural que queremos preservar y fomentar. Respeto por la diferencia, sea ella artística, estética, filosófica o étnica; respeto por el ambiente, buscando la armonía entre el Hombre y la Naturaleza; respeto por el patrimonio monumental que es espejo de esa tolerancia entre culturas, sabiendo que nuestra riqueza y modus vivendi residen, precisamente, en esas raíces diversas y pluralistas .

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