El departamento de propaganda del gobierno de la República Popular China hizo y lanzó un videojuego llamado "Había una vez un virus", en el que se burlaba de la respuesta que el gobierno estadounidense dio a la propagación del coronavirus.
Naturalmente, el primer objetivo es destacar y alabar el comportamiento de China en relación con la pandemia y haber advertido a los Estados Unidos que un virus potencialmente peligroso había aparecido en su territorio.
En el videojuego, que consta de dos piezas de "Legos", un guerrero chino de "terracota" que se protege con una máscara y la Estatua de la Libertad estadounidense, este responde a la advertencia oportuna: "Es solo una gripe".
El guerrero también ridiculizará a Trump, quien ante serias advertencias puso en peligro la salud del pueblo estadounidense, al no haber hecho nada.
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